[son las once y dieciséis de la noche de ayer. Me apetece abrir una Super Bock Stout que tengo en la nevera. También freír un par de pataniscas y cortarme una tapita de queso de oveja junto unos berberechos de roca con un chorrico de Espinaler. Brindo por la poesía,por LeTour1987 y los suyos. Por Joana y ACP. Por Martín, Júlia y Guillem. Por Leonor… y por vosotros todos casi sin excepciones.]
No me acuerdo cuando escribí mi primer poema, pero estoy seguro que fue alguna prosa poética del estilo que tanto detesto actualmente; si una cosa me ha aportado la edad, alguna cana salvaje y el dejarme bigote separado de la perilla (rompiendo la barba tipo cerrojo estilada en el Mundial de USA ’94. Miren si no fotos de Caminero) ha sido dejar reposar los sentimientos en el momento de escribir. Doy mil vueltas a las palabras durante días o semanas hasta que tengo la composición definitiva; evitando aliteraciones buscando sinónimos, investigando sobre dobles sentidos, destrozando redundancias. Luego transcribo el poema a una cuartilla definitiva, pongo la fecha en algunos casos y lo dejo descansar. Hace unos años yo no sabía nada de sonetos, ni de rima, ni haikus ni tankas ni nada por el estilo; ahora tengo algo más de idea. Tampoco sabía quién era Aníbal Núñez ni Mello Breyner ni mucho menos Ferrer Lerín… Sigue leyendo